El mundo de los colores ha fascinado a los académicos durante miles de años, según lecturas que tuve. Debido a esto, conocemos la psicología del color, en la cual se vinculan los colores con respuestas emocionales. Se cree que los colores tienen el poder de influir en mejorar la memoria y la atención. En el tema del jueves pasado leímos sobre su importancia y su significado. En lo personal he venido aplicando algunos cambios y puedo dar testimonio de lo real que es.
Por otra parte, se dice que una casa ordenada mejora la calidad de vida. No sólo porque se evita la acumulación de polvo y suciedad, sino también porque se genera un ambiente de tranquilidad y armonía. Pero una realidad es que vivimos tan deprisa que comúnmente se ve en muchos hogares, que se deja de lado la organización de ella. Puedo decirte que es una realidad ya que lo veo mucho en las casas que visito a través de mi trabajo en seguros. La científica Nicole R. Keith, se llevó una sorpresa inesperada al descubrir durante una de sus investigaciones, que las personas que cuidan más de sí mismas y realizan actividades físicas cuidan más de sus hogares. La investigación mostró que este tipo de personas cuentan con una mejor salud en general. La limpieza y la desinfección son fundamentales para mantener una casa libre de polvo, ácaros y gérmenes, y por consiguiente de enfermedades respiratorias e infecciosas. Por no hablar de los peligros que acarrea la presencia de moho en el baño. Otro reciente estudio llevado a cabo por la marca IKEA, reveló que 9 de cada 10 españoles se sienten relajados y cómodos en espacios bien decorados y ordenados, y 8 de cada 10 afirmaron que estos ambientes fomentaban su creatividad. ¡Así es! Por eso el lugar que elijo para leer y escribir deben inspirarme con comodidad y belleza. Suele decirse que cada hogar refleja la personalidad de su propietario. Y es que la forma en que organizamos nuestro espacio vital, dice mucho de nosotros. Este punto es unos de los que doy en clases de ventas. Les expreso, que es importante sentirnos seguros de sí mismos en lo que hacemos, pues al llegar a un hogar, las personas comprarán no tanto por la marca o el nombre de una compañía, sino por lo que vean en ti y cómo te sientan. Parte de esa seguridad la reflejaremos en nuestro tono de voz, en el conocimiento del producto, en nuestra organización tanto a nivel personal como en la organización de nuestro maletín y documentos. Creamos o no un cliente a la hora de comprar se fija en todo. Y lo que he mencionado anteriormente, influye en nuestra salud mental. También leía de ese estado que: 1. El desorden del hogar nos hace perder tiempo. ¿Por qué? Bueno, Seguro que más de una vez te has pasado varios minutos intentando localizar alguna cosa porque no sabes dónde la dejaste o guardaste. Ya que si no se elige un lugar para cada cosa, te acostumbras a ponerla donde caiga y luego no sabes donde hallarla... ¿Verdad? 2. La falta de orden provoca pensamientos negativos y erráticos cuando tenemos que hacer frente a los problemas. 3. Se ha demostrado que puede generar cansancio y fatiga a nivel físico y mental, restringiendo las relaciones personales. El problema es que esto va sucediendo de forma progresiva sin que nos demos cuenta. Los estudios psicológicos hechos al respecto han comprobado que si dedicas 20 minutos al día mínimo para ordenar tu casa puedes reducir considerablemente los síntomas de ansiedad o depresión, logrando sustituir los medicamentos para estas aflicciones. Ahora, y para ir cerrando el tema de hoy ¿Qué significa o que nos enseña la Biblia, sobre el desorden? El desorden es un sinónimo de tener las cosas mal ubicadas o un descuido sobre lo que tenemos. Nuestro Dios es organizado, así lo dice Pablo «...pero hágase todo decentemente y con orden.» 1 Corintios 14:40. Es por eso que Dios nos motiva para que seamos ordenados. El libro de los Proverbios ofrecen mucha inspiración cuando se trata de limpieza y organización, por ejemplo leamos: Proverbios 11:29 DHHDK "Al que descuida su casa, nada le queda; el necio siempre será esclavo del sabio." La Biblia enseña que Dios es un Dios de orden: "¡La creación de nuestro Dios es majestuosa y sublime! Tu pusiste la tierra sobre sus cimientos, y de allí jamás se moverá… Tú hiciste la luna, que marca las estaciones, y el sol, que sabe cuándo ocultarse. Tú traes la oscuridad, y cae la noche, y en sus sombras se arrastran los animales del bosque. ¡Oh Señor, cuán numerosas son tus obras! ¡Todas ellas las hiciste con sabiduría! ¡Rebosa la tierra con todas tus criaturas!" (Salmos 104: 5, 19, 24) "En el principio creó Dios los cielos y la tierra. La tierra era caos y confusión y oscuridad por encima del abismo, y un viento de Dios aleteaba por encima de las aguas. Dijo Dios: «Sea la luz», y la luz fue.” Génesis 1:1-3 Así comienza el Génesis y es, por tanto, la forma que tienen las culturas judías y cristianas, de entender la creación. Crear es ordenar. Poner orden donde sólo había caos. Si te fijas, desde que comenzó la creación Dios hizo todo bajo un orden y siguiendo unos pasos. Cuando habló con Noe le dio instrucciones de cómo Él quería que fuera el arca. ¿Te acuerdas? Y muchos de nosotros, sus hijos, hemos venido siendo desordenados. Lo bueno ahora es que si somos consientes y reflexionamos un poco en lo que les he compartido estas dos semanas, podemos ver claramente que TODO tiene un "por qué", y todo causa un EFECTO positivo o negativo. Desde cómo nos vestimos, cómo hablamos, qué música escuchamos, cómo decoramos, qué colores usamos, y qué tan limpios y organizados somos. Entonces, el resultado de nuestra vida depende de nuestras elecciones, decisiones y acciones. Ya lo hemos hablado o leído en diferentes reflexiones, como también hemos dicho que es normal que tengamos pruebas, caídas y grandes retos. Pero al estar leyendo y estudiando sobre todos estos temas, podemos darnos cuenta que a pesar de todo, podemos elegir tener una calidad de vida Alegre, Pacífica, Divertida, Romántica, Plena. En resumen, todos podemos dirigir nuestro timón de vida en sentido contrario, o en un sentido con mejor dirección y ubicación. ¿Por qué? ¡Porque está en nuestras manos querer aprender a vivir diferente! Está en nuestras manos, seguir EDUCANDO a nuestro cerebro nuevamente para eliminar cosas y actitudes erróneas con las que hemos venido cargando. Y para ello necesitamos INVERTIR tiempo como lo hemos venido haciendo a través de estas lecturas. Nada pasa sólo por inercia o sólo por desear. Las cosas que cambian para bien en nuestra vida, han sido primero, porque hemos aceptado nuestro error, y segundo, porque hemos decidido hacer un cambio. Y al decidirlo hemos tomado tiempo para leer, reflexionar y aplicarlo. ¿Qué bendición tan grande, verdad? Bueno mis bellos lectores. A ver con qué tema te sorprendo la semana entrante. ¡Espero como siempre hayas aprendido algo nuevo como lo hice yo! Un fuerte abrazo... -Adry Victoria-
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El martes compartí con ustedes un tema tal vez delicado, misterioso y quizás desconocido para muchos. Ese tema fue la Importancia de la música que escuchamos, los colores que escogemos, tanto en el vestir, como en la decoración de nuestras casas. La música, la limpieza, las fragancias que usamos e incluso con quienes nos rodeamos. Escribí sobre ese tema con base en una crisis emocional vivida, y lo que me llevó a investigar maneras de mejorar y superar dichas crisis que suelen llegar de vez en vez.
Esto me llevó a experimentar en carne propia, si dichos consejos dados con respecto a lo anteriormente mencionado, era verdad y si funcionaban. Les compartí muy contenta cuál había sido el resultado de la primera semana, y el deseo tan grande que tenía de seguir re educando mi cerebro a sentir y vivir mejor, ayudada de algunos detalles como el cambio de los colores en mi vida en general. Siguiendo con mis lecturas de investigación, te compartiré hoy lo que encontré bíblicamente hablando, sobre la importancia de saber entender y elegir los colores. Algo que me emocionó más con respecto a los cambios que hice en mi casa la semana pasada y darme cuenta que no era solo un aspecto mental, sino que tienen un fondo bíblico e importante para Dios. Aquí vamos... Los colores como los números, tienen un significado importante en la Biblia. Comprender qué simbolizan los diferentes colores puede ayudarnos a obtener una comprensión más profunda. Los tres colores primarios encontrados en la naturaleza son el rojo, el amarillo y el azul. Cada uno de estos tres colores primarios tiene un significado particular en la Biblia.
El simbolismo del rojo extiende su significado para las personas como una metáfora de la humanidad. En el Antiguo Testamento, el sacrificio de sangre de un animal significaba expiación por el pecado de uno ( Levítico 17:11 ). Los israelitas también pintaron la sangre de una ofrenda de cordero de Pascua para que el ángel de la muerte pasara sobre sus hogares durante la décima y última plaga de Egipto (Éxodo 12: 1-13). Sin embargo, el rojo se asocia más comúnmente con la sangre de Jesucristo que derramó, como el precio del bono, para nuestra salvación en la cruz del Calvario (Colosenses 1:20).
El azul se traduce en hebreo como Tekelet . También vemos que en la Biblia significa púrpura, (Ezequiel 23: 6), o violeta (Jeremías 10: 9). Tekelet era el color asignado para la ropa del sacerdote, en particular, sus dobladillos (Éxodo 28: 5-6). En Lucas 8: 40-48 , la mujer con el problema de la sangre fue sanada por nuestro Sumo Sacerdote, Jesucristo, cuando tocó el borde de Su vestido. Por lo tanto, el azul también está acreditado como el color de la curación y la gracia de Dios.
Además, en el Libro de Apocalipsis, se hace referencia a la Nueva Jerusalén como una ciudad de oro puro ( Apocalipsis 21:18 ). El amarillo y el oro también representan la presencia de Dios (Deuteronomio 4:24 ) y la purificación a través del fuego (1 Pedro 1: 7). Además de los colores primarios, los colores secundarios también tienen importancia en la Biblia.
Una miríada de colores está representada en Génesis 9:13 cuando Dios envía un arco iris después del Diluvio. El arco iris es un símbolo del pacto que Dios hizo con nosotros para nunca más destruir a la humanidad ni a ninguna criatura viviente. Estudiaré para compartir contigo la semana entrante el tema sobre cómo influye en nuestra actitud y diario vivir la decoración y limpieza en nuestros hogares. Bendiciones abundantes de Nuestro Padre Celestial para todos ustedes mis bellos lectores. Espero hayas aprendido como lo hice yo. Sabes renunciaré a vestirme de negro. ¡WOW! Antes mi closet era de ese color. Un abrazo, -Adry Victoria- El martes de la semana pasada les compartí sobre la crisis nerviosa o sentimental que tuve y las lecciones que aprendí en la travesía de esos 4 días con el dialogo sostenido con mi Pastor de juventud. ¿Recuerdas? Te comenté que una de las cosas que volví a recordar, es que era normal tener o pasar de vez en cuando por esos bajones de ánimo. Lo importante es no quedarnos allí.
Bueno, te diré que esta semana que pasó, experimenté varias cosas con respecto a el comportamiento mental, emocional y espiritual. Si bien es cierto que habrá días malos, que somos seres humanos con constantes retos y que no todo es perfecto, también es muy cierto que en nosotros esta el control. Nosotros tenemos un poder tan, tan grande, que podemos elegir si nos dejamos dominar por los sentimientos, o elegir si nosotros tomamos el control de ellos. Si permitimos que ellos sean los que tengan el control, nos llevará a sentirnos frustrados, deprimidos, derrotados o incluso culpables de nuestra caídas. Esto fue lo que me paso la semana ante pasada. Ellos tomaron el control porque así se lo permití. Meditando en la reflexión que compartiría contigo hoy, me acordé que ya una vez había escrito sobre este tema de las emociones, y lo que nos aconsejaba Joyce Meyer en su libro “Dominando Nuestras Emociones”, y pude volver a comprobar que definitivamente es importante leer a diario nuestra biblia y tener nuestro tiempo devocional. Pero también el leer varias veces esos temas que identificamos que son de ayuda para nuestro crecimiento, sanidad y superación. Vale la pena mencionar que NO todas las lecturas son para todo el mundo, y que muchas de ellas son muy buenas, pero algunos temas son para ser leídos una vez y ya. Hay otros que debemos leer y volver a leer de vez en cuando para refrescar detalles que nos ayudan en nuestras luchas. Entonces la conclusión es que, si quiero caer menos, sufrir menos, llorar menos y ser más victoriosa, debo re educar diariamente a mi cerebro, y ser YO quien TOME EL CONTROL de mi estado de ánimo. Para lograrlo, debo estudiar a diario, como quien estudia una carrera universitaria. No se es Doctor solo con sentir deseo de serlo o pensarlo, ni se es odontólogo, científico, profesor, etc. Se DEBE estudiar. ¿Y cómo se estudia? Leyendo, investigando y practicando. En ese proceso, se toman muchas notas y se habla mucho del tema, se escuchan audios, conferencias y hasta se trasnocha demasiado, porque para aprender y lograr graduarse se debe INVERTIR TIEMPO... ¿Verdad? Igual es en nuestro camino al cambio emocional, sentimental y espiritual. Debemos invertir tiempo en aquello que nos ayude. Por esa razón esta semana que pasó, estuve buscando lecturas y formas que me enseñaran a cómo seguir sanando, valorar más la vida y oportunidad que a diario tengo al abrir mis bellos ojos. Entonces me propuse que lo primero que tenía que hacer al escuchar la alarma de mi celular, era apagarla y seguidamente, mientras mi mente reacciona para levantarme al baño, era colocar la prédica del día. Entonces abrí la aplicación de YouTube en la pantalla principal, busqué cuál era el Pastor que más me gustaba escuchar, cosa que al abrirla medio dormida, no tendría que batallar mucho, ya que sería lo primero que me aparecería. De esta forma doy gracias a Dios con más ánimo y estoy programando a mi cerebro para que comience el día lleno de esperanza, agradecimiento y bendición, ¿Acaso has escuchado alguna predica que empiece negativamente? Creo que no. Aunque sí hay algunas que uno puede sentir que son un regaño. Pero con todo y eso, siempre son llenas de enseñanza y bendición, y si es que llegan a ser regaño, pienso que es el Espíritu Santo hablándonos. Entonces volviendo al punto, perdón por los desvíos que suelo hacer, debemos re educar a nuestro cerebro si queremos un nuevo y diferente estilo de vida y sentimientos. Al empezar mi re educación cerebral y emocional lo hice decidiendo la forma en cómo despertar y con qué o con quién hacerlo. En mi caso la elección fue la predica. Te contaré lo segundo que implementé en mi plan de cambio y cómo me sentí... Encontré en mis investigaciones de lecturas hechas, que hay muchas cosas que influyen en nuestra actitud, positiva o negativamente, como por ejemplo, la música que acostumbremos oír, los colores, la organización, la limpieza de nuestra casa, auto o estación de trabajo. También las personas que nos rodean e incluso el color de ropa que usemos. Bueno, analizando un poco al respecto encontré que hay mucha verdad en esto. Por ejemplo: estarás de acuerdo conmigo que hoy en día hay música que solo nos llena de tristeza, recuerdos y nostalgia. Hay quienes dicen que no les afecta negativamente, pero a la mayoría de personas que conozco que les gusta escuchar mucho este tipo de melodías, son personas apagadas, poco calladas y muy solitarias. Por lo tanto yo me pregunto: ¿Realmente necesitamos estar en ese estado de ánimo? ¿Me ayuda a ser más feliz conmigo misma? Por lo menos a mi no. Ok, siguiendo con la lectura, dice que los colores que usamos en nuestra ropa pueden determinar qué nos domina más. Si la alegría o la tristeza, el entusiasmo o la pasividad. Otro aspecto es mirar cómo tenemos decorada nuestra casa, en el orden o limpieza de la misma y hasta las fragancias que sintamos en ella. Podrás pensar en este momento que es ridículo este punto que te comparto, o que no aplica para todo el mundo. Pero te diré que no es así. Lee detenidamente lo siguiente con respecto a la música por ejemplo. Los efectos beneficiosos de la música sobre la salud mental se han implementado y conocido por miles de años. Los filósofos antiguos desde Platón hasta Confucio y los descendientes de Israel cantaban las alabanzas musicales y las usaban para calmar la tensión.
La investigación moderna apoya la sabiduría convencional de que la música beneficia el estado de ánimo y la confianza. Yo pude experimentar que al combinar ciertos colores en la decoración de mi casa, me ayudaron a sentir más tranquilidad y alegría, a eso le agregue un toque de música con volumen suave. Y como el 80 % de mi trabajo es telefónico, puse música cristiana instrumental, logrando así un mejor enfoque. En cuanto a fragancias, busqué algunas velas de olor que fueran de mi agrado. También decidí no colocarme nada de color negro y si es que me dieran ganas de ponerme algo con ese tono, lo combinaría con un color alegre como el amarillo. Por ende puse en practica todo lo que había leído al respecto y ver el resultado. Esto acompañado de mi decisión de cómo o con qué despertar en la mañana... “la prédica” ¿recuerdas? ¡El resultado de esta semana que pasó fue maravillosa! Te confieso que durante estos días he compartido la experiencia tan bonita que tuve con cada persona con la que me senté a platicar a nivel de trabajo y con amistades. Motivándolas a que intentarán hacer este tipo de cambios y vieran los resultados tan buenos que les podría traer a sus vidas. Alguien me dijo: - Adry todo es psicológico. - Y mi respuesta fue: - Bueno, pues si todo está en mi mente, entonces vale la pena educar a mi mente para que piense, haga y sienta de forma psicológicamente positiva. Entonces la ACTITUD, EL ESTUDIO, EL DESEO Y LA PRÁCTICA SON FUNDAMENTALES PARA LOGRAR UN RESULTADO POSIBLE Y EXITOSO. De repente al terminar mi jornada el viernes volví y me senté en las escaleras. Pero esta vez, En vez de sentarme a llorar y preguntarme “¿por qué?” Y llenarme de más nostalgia y depresión, me senté y dije: -¡Dios Gracias! Qué linda semana tuve, gracias por ayudarme a llevar a cabo lo que pensé, decidí y tome acción. ¡Gracias, Gracias, Gracias! Gracias por mi trabajo, por mi actitud y por tan bella casa en la que vivo. Con tu ayuda y en tan pocos meses me está quedando hermosa, y quiero disfrutar tanto de ella como nunca antes lo había hecho en ningunas de las que he vivido. Te pido que de ahora en adelante pueda seguir educando a mi cerebro a vivir bien. Que si tengo alguna caída, sepa sacar buen provecho de ella, ya no dándole cabida a que mis emociones me controlen negativamente. Perdóname por ser quejumbrosa, a veces, negativa y llorona. Ayúdame a seguir encontrando material que me ayude a ser victoriosa en todas mis áreas débiles. Amén. - TÚ DEDICAS TIEMPO AL LEERME. ¡FELICIDADES! PIDO A DIOS SIEMPRE, QUE MI APORTE TE AYUDE Y BENDIGA TANTO COMO LO HA HECHO CONMIGO. UN ABRAZO GIGANTE... -Adry Victoria- A veces creemos que solo podemos ayudar a otros en cosas o situaciones que nosotros ya hemos pasado y solucionado, y por lo tanto se habla con conocimiento de causa. Bueno, déjame decirte que esta semana aprendí que no siempre es o debe ser así.
Recientemente pase por unos días de crisis emocional, a pesar que me he sentido motivada con mi pagina y con lo que hago en ella. Mis hijos han estado bien y mi trabajo igual. Mi reto diario, es levantarme con emoción por haber despertado con vida, con salud y con la certeza que Dios nunca me suelta. Pero con todo y eso, me sentía triste, sin animo, sin ganas de hablar y con un dolor en mi cuerpo como si estuviera enferma, apagada... Me sentía en una cápsula de cristal hermosa, pero sola y sin sentido. Entonces me decía: -Qué pasa Adry, no te entiendo. Sé paciente. Sufres porque quieres. Es como si constantemente tuvieras que estar lastimándote por un pasado que ya no se puede remediar. Quieres que todo se solucione en un abrir y cerrar de ojos. Y las cosas NO funcionan así amiga. Por qué no aprendes nuevamente a aplicarte tu famoso eslogan “Un día a la vez”, “Por hoy me contratare para sonreír y hacer de este día algo maravilloso”.- Entonces sentada en las escaleras de mi nueva casa y la cual espero sea la última donde tenga que vivir en esta tierra. Lloraba de una manera desconsolada y le preguntaba a Dios: ¿Por favor explícame qué me pasa? ¿Cómo es posible que pueda ayudar a tantas personas con tips o ideas de cómo superar determinados traumas o sucesos dolorosos, y yo no pueda hacerlo conmigo en todas las áreas? ¿Qué pasa conmigo? Acabo de escribir durante todo el mes de agosto sobre el amor, sobre sus diferentes etapas y lo fascinante que me parecía no solo el tema, sino ese sentimiento, al que nunca renunciaré. Un tema que me traía contenta y del cual descubrí que es parte de mi esencia. Pero a pesar de eso, un día me veía sentada llorando, sin poder escribir, sin poder trabajar. Llena de remordimientos, recuerdos, y tal vez culpas. Entonces volvía y le preguntaba a Dios: -¿Qué pasa conmigo? ¡Por favor perdóname y ayúdame! creo que me estoy enloqueciendo.- le dije. También le exprese: -Necesito trabajar y sin ánimo, no lo lograré, porque mi tono de voz reflejará lo mal que estoy, y no creo que así vaya a lograr ninguna venta, mucho menos puedo escribir... ¡No me sale nada¡ - Después de llevar 3 o 4 días así, en esa guerra conmigo y sin explicaciones o respuestas, me escribe mi editora Claudia preguntándome: -Adry, ¿ya tienes material listo para la semana entrante? Medio lo leí y dije - ¡OMG! ¿Qué le digo? - Y abrí mi celular y le envié un audio diciéndole que estaba en crisis. Le dije: - Clao, no pongas nada esta semana. Solo ora por mí.- Su respuesta fue: - Claro amiga, lo seguiremos haciendo, y esta semana publicaremos textos bíblicos.- A lo que respondí: -Perfecto. ¡Gracias por tu apoyo!- Minutos más tarde me suena el teléfono y era su esposo, Mi Pastor Richard. -Adrianita, Adrianita. ¿Qué pasa contigo?- ¿Y sabes? Me volví a sentar en esas escaleras, donde creo que me escondo y abro mi corazón. Entonces le conté lo que pasaba con mi corazón, los sentimientos que tenía y el cómo sentía que Dios me miraba. Y le dije: Pastor, ¿si hoy muero me iría al infierno? Creo mi consciencia me esta hablando fuertemente. Entonces me dio mi primera lección, cuando me dijo: -Adry, cómo no vas a poder escribir, si precisamente lo que tú le muestras a la gente a través de tus escritos, es que somos de carne y hueso. A través de tus experiencias compartes una realidad de lo que somos los seres humanos y das ánimo, esperanza.- Entonces pensé, bueno es verdad que luchamos, pero también pasaremos por esos momentos de debilidad. Que reímos, pero también habrán momentos donde lloraremos. Que mejoramos a través de las reflexiones, las pruebas, los retos, pero también volveremos a caer y equivocarnos, porque finalmente nunca seremos perfectos. Entonces porque no seguir siendo esa humana que le muestra al mundo cómo se lucha, y cómo se obtiene victoria después de... ¿Sabes por qué? Porque me quiero exigir al máximo a ya no caer. A ya no sentirme nunca más deprimida. A ser 100 % fuerte y triunfadora. Pero me cuesta aceptar que TODO tiene un PROCESO. La segunda lección que recibí esa noche fue: -Adry. ¿Se vale de vez en cuando sentir nostalgia? ¡Sí! ¿Se vale pensar en el pasado y reflexionar sobre él? ¡Sí! Pero NO te quedes pegada en un “si hubiera” o en un “¿por qué?" El pasado es pasado. Tú lo has dicho varias veces. Ahora suéltalo y enfócate en construir mejor tu PRESENTE. Por que el futuro bueno que te puede estar esperando, estará basado en lo que SIEMBRES AHORA.- Algo así fue lo que me dijo o como lo entendí. Y ¡sí! ¿Qué ganamos con estar torturándonos? ¡NADA! Pero a veces, a pesar de que lo sabemos, somos masoquistas, y NOS SENTAMOS EN EL DOLOR, permitiendo que nuestras emociones nos dominen y nos lleven por el camino de la desilusión y la tragedia. A veces damos cabida al diablo que gane. Entonces al comprenderlo esa noche me sentía más enojada conmigo... Tercera lección: -Dios conoce tu corazón.- Me dijo: -Tus intenciones, tus preocupaciones. Él nunca nos condena, nos enseña, nos da la oportunidad de arrepentirnos, nos guía a través del Espíritu Santo a tomar mejores decisiones. Más es lo que nosotros nos castigamos y condenamos que lo que Él hace o hará.- Al día siguiente, después de haber hablado con el Pastor y casi que confesarme, oramos y logré tener un despertar mucho, mucho mejor. Animada y con el pensamiento de tener un buen día. Con el pensamiento de ya no permitirme mas estar así, bajé a la cocina para preparar mi acostumbrado té de las mañanas, y curiosamente en ese momento decidí prender mi tablet. ¿Y sabes qué fue lo primero que me salió? El titulo de un video llamado: “No Malgastes Tu Dolor” una predica de Joyce Meyer. ¡WOW! Increíble cómo Dios trabaja. Fue como un complemento perfecto a la charla sostenida la noche anterior. En esa prédica ella decía que en ocasiones le preguntó a Dios ¡cómo era que ella podía ayudar a otros y no lo podía hacer con ella misma! Hasta que un día entendió que cuando trabajaba ayudando a otros, Dios simultáneamente lo hacía con ella. Al ella compartir y animar a otros a sanar, a perdonar y a acercase a Dios, ella iba sanando su dolor, iba perdonando e iba mejorando. Dios le enseñó o le reveló, que en vez de quejarse y lastimarse con lo sucedido en su vida, lo utilizara para bendecir y dar testimonio a otros. ¡Y sí! ¿Acaso el fin o uno de los propósitos que Dios tiene para nuestras vidas no es que nos ayudemos unos a otros? ¿Que oremos unos por otros, y que nos amemos? ¿No es verdad? Entonces abrí mi libreta donde escribo para ti y para mí, e inspirada nuevamente comencé este testimonio. Queriendo decir, no soy perfecta, aun me duelen cosas, aun cargo con fantasmas de mi pasado, aun no he podido superar todo, ni he logrado dejar de querer ni de extrañar cosas o personas que de una u otra manera aportaron cosas buenas a mi vida. Y comprender que debemos recordar más las cosas buenas, que los detalles malos. Lo malo debemos desecharlo. Y cuando logramos hacerlo, nuestro corazón NO siente odio. Ese es el detalle conmigo: ¡Nunca cargo odio o resentimiento por NADIE! Cuando recuerdo sucesos malos, los veo como un mal momento que la persona tuvo y veo mi interior, donde también encuentro malas frases, reacciones y defectos. Entonces digo: ¿Cómo ver lo malo en otros, si yo también tengo cosas malas en las que debo trabajar? Mejor es ver los detalles y acciones bonitas, porque eso es lo que quiero que vean en mí. Recordemos que: NO PODEMOS RECIBIR LO QUE NO PODEMOS DAR. Entonces yo quiero dar amor, ejemplo, misericordia, entendimiento, paciencia, perdón, y una honesta y leal amistad en todos los aspectos de la palabra. Di gracias a Dios porque Claudia me escribiera. Porque el Pastor Richard me llamara y ser mi confidente. Di gracias por poner esa predica al levantarme al día siguiente y recordar que no tengo que ser perfecta para poder escribirte y escribirme. Recordar que hasta al mejor panadero se le quema el pan de vez en cuando. Al mejor cirujano y anestesiólogo se le muere un paciente y al mejor psicólogo también le pueden dar ataques de ansiedad y depresión. Entonces ¿Por qué pensar que YO no puedo tener una crisis en medio de mi lucha de superación y nuevo comenzar, después de una dura y difícil separación, después de varias equivocaciones por cabezona? Es verdad que Dios me ha hecho una mujer luchadora y fuerte. Me ha hecho una mujer sobreviviente de duras caídas, y me ha dotado de una gran sonrisa que inspira confianza. Pero, ¿Cómo logré convertirme en eso? ¿Acaso nací así? ¡NO! Tuve que pasar por varias circunstancias donde fui moldeada. Donde fui preparándome para que por más que me doliera, iba a aprovechar cada circunstancia para aprender, para madurar, y para darme el trabajo que hoy me ha dado. Porque de lo contrario, ¿Qué testimonios daría? ¿Cómo es posible que a menudo se nos olvide esto, y nos sentemos a llorar y lamentarnos? Dios nunca nos dará más de lo que podamos soportar. Y todo tiene un por qué, así haya sido nuestra culpa o error. Es lo que nos enseña en: 1 Corintios 10:13 TLA “Ustedes no han pasado por ninguna tentación que otros no hayan tenido. Y pueden confiar en Dios, pues él no va a permitir que sufran más tentaciones de las que pueden soportar. Además, cuando vengan las tentaciones, Dios mismo les mostrará cómo vencerlas, y así podrán resistir.” Una de las partes más difíciles de la vida cristiana es el hecho de que ser un discípulo de Cristo no nos hace inmunes a las pruebas y las tribulaciones de la vida. Por qué un Dios bueno y amoroso nos permitiría pasar por cosas tales como la muerte de un niño, enfermedades y daños, a nosotros mismos y q nuestros seres queridos, como dificultades financieras, preocupaciones y temor? Ciertamente, si nos amara, quitaría todas estas cosas de nosotros. Después de todo, ¿no significa el amarnos que Dios quiere que nuestras vidas sean fáciles y cómodas? ¡NO! No es así. La Biblia enseña claramente que Dios ama a aquellos que son Sus hijos, (Romanos 8:28). y “todas las cosas les ayudan a bien”. Eso debería significar entonces que las pruebas y tribulaciones que Él permite en nuestras vidas son parte de todas las cosas que nos ayudan a bien. Por lo tanto, para el creyente, todas las pruebas y tribulaciones deben tener un propósito divino, ¿Verdad? las pruebas y tribulaciones, están diseñadas para permitirnos alcanzar esa meta. Es parte del proceso de la santificación, siendo apartados para los propósitos de Dios y equipados para vivir para Su gloria. En 1 Pedro 1:6-7: Se explica la manera en que las pruebas logran esto mencionado. “En lo cual vosotros os alegráis, aunque ahora por un poco de tiempo, si es necesario, tengáis que ser afligidos en diversas pruebas, para que sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo”. Por lo tanto, entre mi charla con el pastor Richard y la predica que escuché, me llevó a recordar, que La fe del verdadero creyente se reforzará mediante las pruebas que experimentamos, y que cuando nos encontremos en ellas DEBEMOS ORAR MÁS. Algo que honestamente no hice... Me sentía tan triste, que no me salía mas que un: -Dios gracias por este nuevo día. Por favor ayúdame a salir de este estado. ¿Dime que me pasa? ¿Dime por qué me siento así, siendo que debo super valorar la oportunidad que me estas dando?- Pero no busqué mi biblia, aunque te diré que me sirvió mucho hablar con mi Pastor. Entonces, quiero entender que debía pasar por esos días, para poder hablar abiertamente con la persona adecuada, enviada por el Señor y darme la respuesta que mi corazón necesitaba, y además, llevarme a recordar varias cosas que acabo de compartir contigo hoy a través de esta reflexión. "Las pruebas desarrollan el carácter piadoso, y eso nos permite gloriarnos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza; y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado” Cada uno de nosotros podemos ayudar a alguien, con una palabra, un abrazo, una sonrisa, o solo con saber escucharlos. Cuántas veces le hemos dicho a Dios: “Esto me está matando” , y no medimos lo exagerados y dramáticos que estamos siendo. En resumen, aprendo que Dios ha venido trabajando conmigo, al yo dedicar tiempo en reflexionar en cómo puedo ayudar a otros con mis propias experiencias. Ojalá puedas ver y aprender hoy, que ¡eres humano! Que somos seres imperfectos con grandes deseos de ser cada vez mejores, pero que con todo y eso, seguiremos teniendo tropiezos. Te mando un fuerte abrazo y espero leer algo de ti con respecto a esta reflexión... Bendiciones y hasta la próxima semana. -Adry Victoria- |
ADRY VICTORIA G. PIEDRAHITA.Palabras de mujer a mujer... Archives
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